El sexo por mensaje de texto, ¿eso existe? Si nuestras abuelas leyeran este artículo por supuesto que contestarían con un rotundo: no. Pero resulta que sí, existe y es cada vez más popular. El denominado “sexting” o “sexteo”, ese que pone a arder los teléfonos móviles alrededor del mundo, está cada vez más presente y con más frecuencia.
¿Y de qué se trata esta nueva tendencia?, pues no es más que una interacción entre dos personas o más, con mensajes eróticos muy subidos de tono, a través de los que buscan encontrar el mismo placer que el sexo que todos conocemos. Cada vez las personas tienen más apertura y se interesan por estas prácticas.
Aunque no existe el contacto con la piel o la penetración, los que lo practican aseguran tener el mismo placer. La tecnología ahora no sólo permite texto, sino también fotos, videos y mensajes de voz, todos elementos que pueden elevar la temperatura a niveles que no has conocido antes.
Una práctica que se ha extendido
Si bien es cierto que esta es una práctica que se ha masificado en el público más joven, también comienza a abrirse camino entre personas de todas las edades, quienes establecen relaciones online o relaciones a distancia. En estas conversaciones se permite todo lo que los involucrados estén dispuestos a dar.
Los que se animan a esta práctica deben estar claros de que todo debe quedar en privado, por ser material sensible si llega a las manos equivocadas. Mientras ambos estén de acuerdo, todo fluye y se puede disfrutar sin prejuicios, sólo por el placer de jugar con la pareja mientras no haya encuentro directo.
Esta modalidad ha venido a ser el modelo de encuentros ideales para adultos que muchos buscaban. Algunos lo utilizan como herramienta para conocer el nivel de erotismo del otro, antes de iniciar una relación o para subir los ánimos antes del primer encuentro sexual.
La mayoría busca placer desde la libertad y la expresión de sus sensaciones sin cohibirse.
Cosas que debes tener en cuenta acerca del sexting
Lo más recomendable si te animas al sexting, es que sepas quién está del otro lado y que, si quieres compartir imágenes o videos candentes, lo hagas con la precaución de no mostrar tu rostro. De la otra persona también debes tener aprobación y por supuesto, respetar su intimidad.
Ahora bien, ¿cuán rápido debo desnudarme frente a mi teléfono móvil?, eso ya queda a criterio de cada persona. Sin embargo, se recomienda que esta práctica se lleve a cabo una vez que se establezca confianza con el segundo involucrado, si es posible cuando ya tienes una relación con la otra persona.
Privacidad y discreción, ante todo
Hay que tomar en cuenta que el material que compartes debe mantenerse privado, pero no todos están dispuestos y por eso el sexting es mostrado como algo peligroso. Ante esta posibilidad, siempre es importante ser cauteloso y considerar los riesgos a los que te expones en caso de no tomar previsiones.
Consigue a alguien serio, y que sepa guardar la privacidad, y si les provoca, experimenten. En el secreto hay mucho más erotismo.
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