La sexualidad femenina en los últimos años se ha convertido en un tema de conversación libre de prejuicios. Lo que ha conllevado la ruptura de muchos tabús. Esta visibilidad del placer femenino se debe, en gran medida, al boom de los juguetes sexuales. De hecho, una encuesta realizada por amantis pone de manifiesto que la mitad de las mujeres en nuestro país llegan al orgasmo con más facilidad gracias a los juguetes eróticos.
Beneficios para la sexualidad femenina de los juguetes eróticos
La encuesta también revela que más de la mitad de las españolas tiene ya, al menos, un juguete erótico. Pero estos productos no solo son un medio para alcanzar el orgasmo. La mitad de las encuestadas reconoce que también le han ayudado a conocer mejor su cuerpo, zonas erógenas y gustos sexuales. Asimismo, la mitad disfruta más de su sexualidad desde que usa juguetes eróticos, tanto en solitario como en pareja. Y algunas aseguran que sus orgasmos son más intensos.
“En amantis hemos visto cómo ha evolucionado la conversación en torno a los juguetes eróticos, y cómo cada vez más personas se animan a conocerse y descubrir más aspectos de su sexualidad. Los succionadores de clítoris comenzaron esta nueva etapa en la que socialmente se habla mucho más abiertamente de la masturbación y el placer de las mujeres, pero el sector no para de crecer y de innovar con productos para todos los gustos y necesidades”.
Cristóbal Icaza, CEO de amantis
Los succionadores de clítoris han sido los grandes protagonistas. Y es que han conseguido que en redes sociales la masturbación femenina sea el top de las conversaciones sobre sexo. Así, no es de extrañar que siga siendo el juguete favorito de las españolas. Al succionador de clítoris le siguen:
- las balas vibradoras
- los dildos con forma realista
- los juguetes que replican el sexo oral
- y los plugs anales.
Uso de los juguetes sexuales en España
El mapa de edades en España es bastante diverso en cuanto al uso de juguetes sexuales por parte de mujeres. De forma general, las mujeres que reconocen tener al menos uno en su poder están entre los 30 a 35 años. Le siguen las mujeres de entre 40 y 50 años. El siguiente grupo de edad es entre 25 y 30 años. Y las más jóvenes, de 18 a 25 años, sólo admite tener juguetes en la mitad de los casos. Aquellas con más de 50 años son las que menos dicen usarlos, ya que solo un 30% tiene alguno de estos productos.
Por su parte, la mitad de las encuestadas suele utilizar los juguetes en solitario. En un 30% recurren a ellos por igual tanto en solitario como en pareja y un 19% los usa casi siempre en pareja. Asimismo, más de un 10% reconoce que si no usa los juguetes en pareja es porque le da vergüenza a planteárselo a la otra persona. Mientras que el 7% no lo hace por rechazo expreso de la pareja.
Algunos hombres todavía ven los juguetes como una ‘amenaza’
Parece que, ya sea por su contribución a la sexualidad femenina o no, los juguetes sexuales van ganando adeptos. Pero todavía siguen existiendo personas que no les convence la idea.
De hecho más de la mitad de los hombres españoles asegura que utiliza juguetes eróticos en sus relaciones sexuales con mujeres. Y en un 29% dice que se animaría a usarlos, pero se sentiría raro pensando que el juguete pueda darle a la mujer más placer que él. Sin embargo, un 13% se negaría en rotundo a utilizar juguetes con sus parejas sexuales. Las principales razones son:
- que les da vergüenza
- se sentirían desplazados
- les da miedo que el juguete dé más placer que ellos
- o que no les apetece experimentar.
“La realidad es que los juguetes eróticos son perfectos para explorar la sexualidad y para aportar innovación a tanto a la autoestimulación como a las relaciones de pareja. Los resultados de la encuesta así lo demuestran y también ponen de manifiesto que los juguetes eróticos cada vez están más presentes en las vidas de las españolas, ayudándoles a conocerse mejor, a disfrutar más de su sexualidad y a normalizar y generar conversaciones que den visibilidad al placer femenino, que durante tantos años ha quedado relegado a un segundo plano”.
Cristóbal Icaza, CEO de amantis
